Japón vs Indonesia: ¿Un duelo desigual? El optimismo del DT japonés
La selección de Japón se enfrentó a Indonesia en un partido que, sobre el papel, parecía una formalidad correspondiente a la fase de clasificación para el Mundial 2026. Japón ya tenía su boleto asegurado, mientras que Indonesia se preparaba para el siguiente round. Sin embargo, el encuentro despertó interés por las declaraciones previas de ambos entrenadores.
La confianza indonesia tras vencer a China
Kluivert, el entrenador de Indonesia, expresó la firme determinación de su equipo por obtener la victoria. "Todo el equipo está lleno de confianza después de la victoria contra China", declaró. Reconoció la superioridad japonesa, pero aseguró que buscarían mostrar su mejor potencial para ganar, incluso jugando en territorio nipón.
Pese a tener asegurado su pase a la siguiente fase, Kluivert confió en que sus jugadores darían lo mejor para cerrar esta etapa clasificatoria con buenos resultados. El entrenador resaltó la importancia de mantener la motivación y el espíritu competitivo, incluso en un partido aparentemente de trámite.
El respeto japonés y la evolución indonesia
Por su parte, Hajime Moriyasu, el estratega japonés, se mostró cauteloso y respetuoso hacia el equipo indonesio. Reconoció el progreso significativo de Indonesia, impulsado por su política de naturalización de jugadores. "Su política es usar jugadores naturalizados para fortalecer su equipo. Han progresado mucho", comentó Moriyasu.
El técnico japonés también destacó la presencia de jugadores indonesios en ligas europeas, lo que, según él, les permite competir a nivel global. Esta opinión refleja un reconocimiento de la creciente calidad del fútbol indonesio y su potencial para desafiar a las potencias asiáticas.
El partido de ida y los cambios en Indonesia
En el partido de ida, Japón se impuso con un contundente 4-0 en Indonesia. Sin embargo, Moriyasu señaló que el equipo indonesio ha experimentado cambios significativos desde entonces, con la llegada de Kluivert y la incorporación de nuevos jugadores naturalizados. Esto sugiere que el encuentro de vuelta no sería tan sencillo como el anterior.
El optimismo del entrenador japonés radica en la capacidad de Indonesia para competir a un nivel global, gracias a la combinación de jugadores locales y naturalizados que militan en el extranjero. Esto plantea un escenario interesante para el futuro del fútbol en la región y la posibilidad de ver a Indonesia desafiando a los grandes del continente.