La Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) ha anunciado un paro nacional contundente y la implementación de protestas sorpresivas a lo largo de diciembre. La medida de fuerza se llevará a cabo el día en que el Congreso de la Nación debata la reforma laboral impulsada por el gobierno de Javier Milei. La tensión entre el gremio y el gobierno se intensifica, anticipando un diciembre conflictivo.
¿Por qué ATE llama al paro nacional?
Según Rodolfo Aguiar, secretario general de ATE, el gobierno nacional ha demostrado una falta de voluntad para el diálogo y el consenso. "Están tirando tanto de la piola que en cualquier momento se va a cortar", advirtió Aguiar, señalando que la situación actual justifica la convocatoria a una huelga general. El gremio denuncia que el Consejo de Mayo, espacio de diálogo propuesto por el gobierno, resultó ser una "encerrona" para el sindicalismo.
Medidas sorpresivas en diciembre
Además del paro nacional, ATE ha decidido implementar protestas "sorpresivas" en diversos organismos estatales durante todo el mes de diciembre. Esta estrategia busca mantener la presión sobre el gobierno y visibilizar el descontento de los trabajadores estatales ante la reforma laboral propuesta.
La decisión fue tomada por unanimidad en el Consejo Federal de ATE, realizado en San Luis, donde representantes de las 191 seccionales del gremio habilitaron a la Conducción Nacional a definir las acciones a seguir. La contundencia de la medida refleja la profunda preocupación de los trabajadores estatales ante las políticas implementadas por el gobierno de Milei.
Paritaria vía Zoom: ¿una estrategia dilatoria?
Aguiar también criticó la convocatoria a una paritaria vía Zoom por parte del gobierno nacional. "Se nota mucho que no quieren dar la cara", denunció el dirigente, sugiriendo que la modalidad virtual busca desalentar las medidas de fuerza. "Si la estrategia es desalentar las medidas de fuerza, les avisamos que no les va a funcionar", sentenció Aguiar.
El paro nacional de ATE y las protestas sorpresivas anuncian un escenario de alta conflictividad social en Argentina. La reforma laboral propuesta por el gobierno de Javier Milei se enfrenta a la férrea oposición de los trabajadores estatales, quienes advierten que no están dispuestos a ceder ante lo que consideran un ataque a sus derechos laborales.