ANMAT: Flexibilización en la Importación de Cosméticos y Productos de Higiene
La Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT) ha implementado una nueva medida que impacta directamente a los consumidores: la flexibilización en la importación de cosméticos y productos de higiene personal. Esta decisión, publicada en el Boletín Oficial a través de la Disposición 3562/2025, busca simplificar los procesos y optimizar la gestión pública, en línea con las políticas de desregulación impulsadas por el gobierno.
¿Qué productos se verán afectados por esta medida?
La nueva normativa elimina la necesidad de intervención de la ANMAT en la importación para uso personal de una amplia gama de productos, entre los que se incluyen:
- Cosméticos (maquillaje, cremas, perfumes, etc.)
- Productos domisanitarios de venta libre (lavandina, desinfectantes, etc.)
- Productos de higiene oral de uso odontológico (pastas dentales, enjuagues bucales)
- Productos higiénicos descartables de uso externo (pañales para bebés y adultos, toallitas femeninas, protectores diarios)
- Productos higiénicos descartables de uso intravaginal (tampones)
- Productos higiénicos de uso intravaginal (copas menstruales)
¿Qué implica esta flexibilización para los usuarios?
Con esta medida, los usuarios podrán adquirir directamente estos productos en el exterior, a través de servicios de courier o durante viajes, sin necesidad de realizar trámites ante la ANMAT. Sin embargo, es crucial tener en cuenta que la importación y el uso de estos productos quedan bajo la exclusiva responsabilidad del usuario, quien asume los riesgos y consecuencias derivados de su adquisición y uso. Esto significa que, en caso de inconvenientes con la calidad o seguridad de los productos, no contarán con el respaldo directo de la ANMAT.
¿Por qué se tomó esta decisión?
Según los considerandos de la Disposición, la medida busca promover la simplificación de procesos y la eficiencia en la gestión pública, optimizando recursos y agilizando trámites. El gobierno argumenta que esta desregulación permitirá una mayor libertad para los usuarios y una operación más dinámica en el mercado de estos productos. A pesar de esto, se insiste en la prohibición de la comercialización de estos productos importados para uso personal.
En resumen, esta flexibilización representa un cambio significativo en la regulación de la importación de productos de higiene y cosméticos, brindando mayor libertad a los consumidores, pero también conllevando una mayor responsabilidad individual.